Ser instinto y libertad

jueves, 20 de diciembre de 2018

Hace mucho tiempo que no tenía tantas ganas de morirme como hoy.
Pero esas sinceras, no las que me encanta exagerar. Esas de ahogarme en mi propio llanto y morirme acorde a toda la pelotudez que encarno.
No entiendo porque tengo tanta mala suerte que ni siquiera me puedo morir.

miércoles, 19 de diciembre de 2018

No tengo ganas.

VENGO APOSTANDO TODO LO QUE TENGO
A UN CABALLO QUE NUNCA GANA.
VOY A TENER QUE DEJAR ESTE JUEGO
O CAMBIAR DE CABALLO MAÑANA

Mi ex me decía que siempre hacía tantas cosas para escapar de mi casa. O de mí.
Creo que la hipotesis de escapar de mí se la dije un día llorando, y a él le pareció muy valida. Ese día lloraba, lo cual no era novedad, porque había entendido que el principal problema era yo, y no había mucho que hacer con eso.
Desde haber sido un nacimiento no buscado, supongo que mi historia cobra sentido. O yo se lo encuentro. Y supongo que desde siempre estoy en el lugar equivocado, en lugar de alguien más.
No puedo dejar de pensar en todo lo que sería mejor si yo no estuviera. Y ni siquiera es un pensamiento suicida porque ni para eso sirvo.
A veces pienso que soy la causante de muchas cosas que quiero arreglar o en las que dejo mi vida por solucionar. Porque tal vez si yo no fuera así, nada pasaría.
Pero pienso como no ser así. Y a veces no hago nada para ser así, y simplemente las cosas pasan. Y no puedo hacer que no pasen.
Hoy leí en el horoscopo un consejo navideño que decia que dejara de querer darle tanto amor a la gente y tanto drama, y que me diera todo eso a mí.
Yo no creo en eso de los horoscopos. Pero entendi que tal vez tengo que dejar de querer que me devuelvan algo que al fin y al cabo doy y nadie quiere recibir.
No es que hoy sea un dia de mierda. Es que todos los días son una mierda y hoy no tuve ganas, o no pude, disimular.
Necesito un abrazo enorme y muy fuerte.
tan fuerte que me deje sin aire.

si no me va a dejar sin aire al menos necesito un abrazo Y NO TENER QUE PEDIRLO.

hago todo mal hasta cuando quiero hacerlo bien.

lunes, 26 de noviembre de 2018

Desilusión

Hoy entendí lo mucho que me importan y me pesan algunas cosas.
Hoy me sentí sola. Aquel que considere mi lugar durante tanto tiempo, dónde me sentía en confianza, en familia. Hoy me sentí sola. Hoy sentí que si yo no estaba era lo mismo porque casi que sobraba en todos lados.
Sé que no es así desde muchísimos aspectos. Y en realidad, me doy cuenta que estoy muchísimo más establecida y acomodada que otros años en mis lugares, en mis funciones, en mis vínculos con la gente.
Pero hoy me cayó la ficha de lo que me duele todo esto.

lunes, 29 de octubre de 2018

Simplemente pasa que

Tengo ganas de verte.

Hoy fue domingo y ví muchas fotos tuyas.  (Y por alguna razón estás más lindo que nunca)
Hoy te extrañé.
Hoy te extraño.

lunes, 22 de octubre de 2018



Soy este desastre
Soy este flequillo mal cortado apropósito. Soy estos ojos chinos y cachetes enormes; estos ojos abiertos con ganas de estar cerrados. Soy esta catarata de incoherencias y arranques inesperados. Soy este cuelgue. Soy esta intensidad con ganas de ser vivida. Soy esta queja liberadora. Soy este soltar eterno. Esta inestabilidad como condición de estabilidad. Soy ese "si no va sin frenos no anda bien" del Indio. Soy ese sin filtro inoportuno; el sincericio siempre más suicida que sincero. Soy una sonrisa fácil, la constante felicidad en las pequeñas cosas. Soy todo lo que critico y admiro, a la vez: esa responsabilidad sobreprotectora. Soy tan obstinada que la perseverancia en mí es un defecto. Soy ese interrogante constante, la desnaturalización en exceso. Soy una búsqueda de aprobación no pedida y siempre ansiada. Quiero tener razón y cuando la tengo no sé que hacer con ella. De tantas veces que la tuve, ya no sé dónde más guardarmela, porque ya no tengo más espacio para guardar nada al interior de esa parte del cuerpo donde van a parar las cosas que no te sirven para nada. Soy un conjunto de esfuerzos sin recompensa. Soy este exabrupto no buscado: las palabras que nadie preguntó. 
Estando soy, (y sin quererlo) siendo estoy. Pero al final, no importa cuánto me pueda alejar, porque siempre vuelvo. Acá estoy. Y una vez más...
soy este desastre.

miércoles, 3 de octubre de 2018

"El enamoramiento es patológico"

Hoy destrabé algo trascendental. Odio auto-psicoanalizarme y no puedo parar de hacerlo.
Estuve en una clase que más que para mí fue para vos. En realidad obvio que fue para mí, y fue crucial para el descubrimiento que hice (o que creo que hice) pero siento que hubiese sido tan útil para vos. Y ahora me muero de ganas de poder contartela. Pero ya no puedo.
¿Por qué no tuve esta clase una semana antes? Tal vez la resolución hoy sería otra.
El enamoramiento es patológico.
Y es algo que siempre dije de modo tosco y alguien puso en palabras académicas. Y es patologico porque en realidad nos enamoramos egocentricamente de nosotros mismos, porque nos enamoramos de cómo nos hace sentir la otra persona.
Y ahora entiendo el por qué de este sentimiento que me persigue hace casi 5 años. Porque como no enamorarme con lo que me hace sentir/creer que soy? Cómo no estar enamorada de esa versión mía que me hace ver como la mujer maravilla? Que me hace sentir que todo lo puedo? Que solo reconoce mis virtudes y me premia por ellas?
Después de esos tres/cuatro meses puede o no surgir el amor.
Ahi es donde las teorias se van al carajo. Porque este enamoramiento del ogt a mí se me extendió poquito nomás en plazo (algo así como cuatro años y medio más, nada). Y el amor surge cuando uno reconoce la idealización que hizo del otro pero se pone de acuerdo para creer que el otro es lo que a uno le falta y viceversa. Si el contrato no se entabla de las dos partes, no funca. Y si el contrato se establece puede durar para toda la vida y nada lo va a derribar, porque es el poder de la mente lo que lo mantiene vivo (yo creo que el amor es un poco eso). Y es ese pacto que nos hace depositar todo en el otro. Pero cuando algo anda mal, ahí aparece el problema. Porque depositamos en el otro todo la culpa de que todo este mal. Y ese sentimiento de insatisfacción recae en el otro y hace que pensemos que en él esta el problema. Y en realidad, no es el otro, ES LA VIDA.
Y ese inconformismo se va a reproducir, siendo un otro, siendo un trabajo, siendo un deporte, siendo eso que nos llena y se va. Y en realidad no hay nada en ese otro que dejó de llenarnos, sino uno mismo buscando algo que solo esta en el poder de nuestra mente, que hace que veamos que eso que "nos completa" esta en él/eso otro. Y en realidad, no es el otro: ES LA VIDA.
Y decime que si todo esto no sos vos, no se explica.
Porque el problema ahora es que entiendo el por qué de mi enamoramiento, pero también entiendo lo peligroso del amor. Y lo peligroso no porque no sea correspondido, sino por lo hasta las bolas que resulté estar finalmente.

Hace ocho horas pensaba que solo era "efecto extrañatis". Ahora pienso que es amor.
DIOS ME ODIA, LO DIGO, LO REPITO Y LO CONFIRMO.

Lo único que quiero es que me leas algún día y puedas procesar todo esto que nunca te voy a poder decir.

martes, 2 de octubre de 2018

OJALÁ ALGÚN DÍA TODO LO QUE TOCO NO SE ROMPA

viernes, 21 de septiembre de 2018

Hubiesemos sido todo

Esta es una de esas cartas que nunca van a ser leídas.
Y que a nadie más que a mí le importan.
Lo que te quiero decir es esto: si no podés quererme o mejor dicho, sino querés quererme: soltame. Soltame y deja que me quieran como me merezco.
No sé cómo carajo me merezco que me quieran, pero soltame.
Y si nadie me quiere no me importa. Pero soltame y déjame en la paz de quererme yo misma. Déjame en la libertad de no pensar en dos siendo una. Déjame en el vacío de mis bajones y en la intensidad de mis días de logros.
Soltame, por favor soltame vos. No me obligues a la culpa de soltarme ni a la condena de atarme de un hilito deshilachado.

Yo siempre quiero todo. Y aprendí que si no es todo no quiero nada.

jueves, 20 de septiembre de 2018

Donde no puedas amar no te detengas

Y acá estoy.
Acabo de decidir que mañana me voy a la mierda.
Todos tenemos una forma de resolver los problemas al fin y al cabo. o no?
Sin dudas, y mal que me pese, la mía siempre es huir.
Cuando las cosas implican una decision, un posicionamiento, una jugada, ahí estoy yo, firme y lista preparada para soltar.
Y al final está bien, o no?
Me dijeron muchas veces que no tengo que decidir por los demás, pero como no hacerlo cuando entendés que no sos lo mejor para ellxs en ese momento?

Mis misiones en la vida de lxs demás cada vez son más cortitas.
Y no está mal que así sean.
Lo difícil es no encariñarme en el camino.

miércoles, 19 de septiembre de 2018

Tengo una tristeza re profunda.
De esas que no se van.
Y a veces pienso que lo que yo quiero no es tan dificil. Son pequeñas cositas. Pero que son enormes cuando dependen de los demás.
Y es horrible porque yo tengo muy claro que la felicidad no puede depender de otros. Pero como ser feliz si no es compartido?
A veces pienso que lo único que necesito es amor.
Necesito amor. Amor en forma de mimos, de palabras. Amor en exceso.
Pero cuando alguien me da ese amor en exceso no lo quiero y huyo. Pero cuando ese amor se va. Quiero amor.
Y asi me paso la vida. Siendo una inconformista.
Buscando un amor que tuve y que perdí. Un amor que necesito pero no quiero. Un amor que me marcó y que me determinó, que me hizo entender que nunca me voy a resignar a menos.

miércoles, 12 de septiembre de 2018

Ay cuando la cague?

Te quiero preguntar:
¿Dónde estás?
¿Por qué no tenes ganas de venir corriendo a buscarme?
¿Cómo haces para no extrañarme?
¿Por qué no estás ahora mismo abrazándome?
¿Por qué no me decís nada lindo? O mejor... ¿Por qué no sentís nada lindo por mi?
Pero...
¿Por qué querés estar conmigo si no sentís nada lindo?

sábado, 1 de septiembre de 2018

A veces creo que es tu fantasma

Estás ebria un viernes antes de la 1am.
Hace un frío polar en el exterior.

Estás ebria. No tomaste para dartela en la pera pero el vino te pegó. Estás ebria porque la vida es una mierda.
Estás ebria porque es la única forma de sobrevivir esta noche.
O no. Porque todo lo que no querías pensar lo estás pensando.

jueves, 30 de agosto de 2018

El boicot tiene forma de medialuna

Es increíble como algunas cosas nunca se van.
Y pienso que simplemente van a convivir conmigo, porque nunca me voy a poder deshacer de ellas.
Con los recuerdos está mas o menos bien. En un punto, creo que desde siempre fui partidiaria de no esconder cicatrices porque al fin y al cabo, nos hacen "ser".
Pero es dificil cuando lo que no se va son las cosas de una que una quisiera eliminar, cambiar.
Me odio por ahogarme en un vaso de agua. Se que hay muchísimas cosas peores, problemas grandes y verdaderos, gente que no tiene para comer, que vive en la calle, personas atravesando vínculos conflictivos de los cuales no pueden escapar, amigas oprimidas, amigos desmotivados ante la vida. Incluso sé que yo misma pasé por cosas peores y siempre algo en mí me obligó a sobreponerme, a no quebrarme, a no dejar que me vean ni dejarme ver destruída.
¿Pero cómo se hace cuándo sabés que hagas lo que hagas no va  a cambiar lo que te molesta? ¿Y que encima solo depende de vos?
Odio cuando no tengo autocontrol. Cuando no puedo controlarme, cuando no puedo prever que va a pasar. Y entiendo que no puedo manejar ni predecir las acciones de los demás, y no me enrrosca. Lo que me hace mal es no poder controlar las mías.
Puedo atarme las manos y no mandarle un mensaje si lo extraño. Puedo guardarme mil cosas que siento para no invadirlo. Pero no puedo cerrarme la boca.
Y todo lo que hago es en vano. Porque aunque me compre un paquete de tutucas, mi hermana se aparece con una bandeja de medialunas que no puedo decir que no.
Y soy tan responsable de mis actos que no puedo hacer otra cosa que llorar.
Llorar porque soy una gorda de mierda. Porque estoy atrapada en este cuerpo, en esta vida, con esta voluntad del orto.
Porque lloro porque no puedo hacer otra cosa. Porque el esfuerzo de una semana se me va al carajo por dos minutos de no controlarme. Porque soy tan imbécil que me merezco ser tan imbécil.
Y pienso que me encantaría ahogarme en mi propio llanto. Pero soy tan inutil que ni para eso sirvo.

jueves, 23 de agosto de 2018

aunque a nadie ya le importe

Tengo ganas de llorar. Muchas ganas de llorar. Llorar porque sí.
Y estoy triste hace días. Y no sé por qué. O capaz que sí. Y es que todo me desborda.
Me desborda la situación.
Todos me queman la cabeza. No importa por qué o qué, pero todo recae en mi. Y siempre recae en mí.
En todos lados estoy asfixiada, oprimida.
(en todos menos en el único que me gustaria sentirme un poco asfixiada).
En dias como hoy en los que todo me sale mal y solo necesito mucho amor, o tal vez amor en forma de mimos, pienso que nunca voy a encontrar otro abrazo como el tuyo. Ni un te amo más doloroso. Pero de eso me olvido porque solo quiero un abrazo. Un abrazo fuerte fuerte.
Que me acerques pañuelitos o el primer rollo de cocina que encuentres.
Que no me preguntes nada y me dejes dormirme mojandote todo el brazo con mis lagrimas y mocos flojos.

lunes, 20 de agosto de 2018

No sé

Pienso un montón de cosas. Por estos días mi cabeza volvió a esos sacudones que hacía rato no tenía.
La clave es como manterse estable en un zamba. O más encontrarle la vuelta para hacerlo. Y claramente yo no la encuentro.
Hace unos días vengo teniendo los mismos pensamientos que a los 15. Quererme ir de esta casa que siento que solo me transmite mucha caca y me construye negativamente.
Hoy fui paciente y aguante. Es difícil el límite entre no meterme y que parezca que todo me chupa un huevo.
Pero empiezo a creer que lo mejor que puede pasar es la segunda, para dejar de sentirme implicada todo el tiempo.
También me replantee muchas cosas sobre la construcción de mis vínculos. Estoy intentando no "hacer espejo" todo el tiempo como me pidió, pero es difícil cuando encuentro una carencia en el, porque son contadas las que encuentro.
En días/momentos como este necesito mucho amor sin explicaciones ni justificaciones. Qué mal me veo.
Otra vez no Anto, por favor.

miércoles, 8 de agosto de 2018

Te hago una proposición

te confieso que 

a lo mejor me gustarías tú de novio



PERO NO
porque yo no quiero novios, ni novias, ni nada 
susceptible de 
ser mentida,
ser convencida,
ser abducida por formar una pareja

(hace un rato pensaba que capaz los discapacitados no somos nosotros, sino los demás.)

miércoles, 1 de agosto de 2018

La ensalada

Despues del fatidico hecho que no vamos a recordar de la entrada anterior, pensé muchas cosas. Creo que solté, y me da miedo. El problema no fue soltar, porque creo que mas o menos hace un tiempo lo hice. El problema fue encontrarme con mis sentimientos.
El problema es darme cuenta que quiero a alguien más.
¿Quién me dijo que tenía que jurarle amor eterno?
A veces no se si es que no puedo o no quiero bajarlo del pedestal en que esta él.
Mi cumpleaños fue una fecha de revolución y a diferencia de muchos otros años, fue feliz. Fue una de esas revoluciones de izquierda, que como el feminismo, van a vencer.
De a poco me voy sintiendo querida y creo que retribuye lo que siento.
Les decía a las chicas que me sentía egoísta porque sentía que "había encontrado algo mejor". Suena superficial sacado de contexto pero básicamente es así.
Pero no "mejor" en términos meritocráticos. Mejor en términos de piecitas. Eso, ese rompecabezas que somos, que nunca se arma, pero que partecitas se van encontrando. Creo que encontré una con la que encastramos por casi todos lados.
Y eso me asusta. Me asusta un montón. Mi corazón roto y mal pegado no esta preparado para esto.
O SI.

(Me quejo de todo, pero me encanta que este ahi)

miércoles, 11 de julio de 2018

A mi ex lo agarró un camión

Qué genial decirlo así. Suena tan tragicómico que le pone toda la emoción que le falta a mi vida.
En realidad creo que el camión me agarró a mí. Pero en vez de quebrarme un pie, a mi me aplastó. Me pasó por arriba y por si me quedaba algo sanito dió marcha atrás y volvió a acelerar para adelante, para asegurarse de haberme pasado bien bien por arriba.
Hace unos días decía que no quería ese amor que me voló la cabeza.
Y hoy no estoy tan segura. Estoy segura que no es lo que quiero mentalmente. ¿Pero como estar segura de algo en el corazón?
¿Cómo si a pesar de saber que no es lo mejor para mí me llena el corazón cuándo me dice algo lindo? ¿Cómo si abrazó en los peores momentos, cuando me quejaba de todo como si estuviera quejándome conmigo misma? ¿Cómo si no hace falta que le pidiera un mimo, si no paraba de mostrarme su amor? ¿Cómo encontrar todo eso en una persona que elijo con la cabeza?
¿Cómo des-amar? ¿Cómo huir? ¿Cómo no haber logrado todo eso a pesar de saber que no es lo mejor para mí?

miércoles, 27 de junio de 2018

Esa indecisión no te la robo amiga

Ayer hice una analogía muy buena a modo de chiste, pero que pensándolo, es bastante verdad. Soy como la Faraona con Nacho. Tengo presente que aparece en mis relatos más de lo que debería, y al principio era algo que me ponía contenta porque entendí que poder hablar de él era una forma de darme cuenta que lo había superado. O estaba en proceso, bah. Y en un punto es así, puedo hablar de él sin que se me llenen los ojos de lágrimas, sin abrir la herida. Hoy está cerrada y es una cicatriz de esas que no tengo ganas de maquillar. Porque es parte de mí.
Pero pienso también en las ataduras que tal vez estoy queriendo encubrir. O que me están costando terminar de soltar.
Hoy tengo bastante más claro algunas cosas. Y eso me asusta también, por eso tengo miedo de estar queriendo confundirme para no hacerme cargo.
Si hay algo de lo que estoy segura, es que nunca más voy a volver a amar a alguien como a nacho (no hace falta que diga su nombre). Porque ese fue el amor irracional, ese que no calculas, que no medis, que no querés sentir, el que te entregas de verdad sin pensar nada ni medir consecuencias, el que no podés explicar, el que no sabés por qué, el que no entendés.
Pero también sé que no quiero volver a sentir eso. Porque encontrarme sin mi poder de pensamiento, sin mi capacidad de controlar las cosas, es algo que no me hace sentir bien, que no es mi mejor versión de mí. Y que no es como yo entiendo al amor.
Pero mi forma de entender el amor capaz es bastante tibia,  y no sé hasta que punto tengo ganas de seguir involucrandome así. Tal vez sí, porque por tibia me escudo, me protejo y no me juego. Pero tal vez no, porque cuando me doy cuenta que estoy sintiendo un poco de más, no sé si no me gusta tanto que la otra persona no acompañe el proceso, como el mero hecho de sentir. RECONOCER QUE SIENTO.

Hoy necesito un abrazo, de esos lindos y fuertes que aunque nos estuvieramos puteando me hacían sentir que todo iba a estar bien. Necesito escuchar un millon de cosas lindas que probablemente para vos eran mentira pero que sabías exactamente cuando decir y que eran las que yo quería escuchar.
A veces necesito más amor del que pienso.

jueves, 21 de junio de 2018

soy 70% darme bronca

Update: madurar es de frutas.
¿O no?
Hoy es uno de esos días donde me gustaría desaparecer.
Y desaparecer solo virtualmente creo que no es una opción valida. No termino de entender si en realidad fue una forma madura de no mandarme cagadas o fue una chiquilinada y debería enfrentar lo que me hace ruido.
Hoy venía caminando y pensé: hay ruidos que debería estar escuchando. Pero pienso que en realidad debería haberlos escuchado antes. Porque hoy hay tanto silencio que se vuelve ensordecedor. O tal vez yo quiero hacerlo ensordecedor, aunque no me doy cuenta o prefiero hacerme la pelotuda. 
A veces tengo miedo que mi inseguridad me lleve a ser una perseguida de mierda. Que suele suceder más de lo que me gustaría. Pero cada vez que intento controlarme al tiempo mi inseguridad me da la razón: no estaba perseguida, eran señales que tenía que ver y me convencí que no. 
El peor final siempre es para mí.
Recuerdenme que cada vez que empiezo a sentir algo tengo que volver a convencerme de que no vale la pena y huir antes de darme una mínima chance. Es claro que todavía no entendí como funciona esto de las relaciones, y por como viene la mano, no parece que vaya a entenderlo en algún momento...

miércoles, 20 de junio de 2018

Vuelvo a ser

Me re gustaría salir conmigo porque sabría todo lo que me pasa leyendo este blog. ¿Por qué la gente que me gusta no hace lo mismo?
Aunque si saliera conmigo, no sé que tan necesario sería tenerlo, porque no entendí muy bien como funciona eso de no decir las cosas que pensás (y sentís).
No entiendo todavía muy bien que me pasa. Quiero todo y quiero nada. Y cuando quiero todo sos tan nada, pero cuando no quiero nada sos tan todo.
Supongo que la historia de mivida se basa en eso: estabilidad pa que la quiero si tengo una montaña rusa de emociones para nunca aburrirme :)

ojalá me muera rápido

miércoles, 23 de mayo de 2018

Hoy me di cuenta que me gustas una bocha.
Y que aprendí que en todas esas cosas que no decís, encuentro y siento.
Qué mal eso de estar tan acostumbrados a las palabras.

jueves, 3 de mayo de 2018

y ahora que aprendí a callarme,
MI AMOR,
me pedís que hable otra vez.


(y a mí que me cuesta tanto hablar...)

lunes, 23 de abril de 2018

Haber perdido la libertad

Mi ex sabía que si me achuraba el flequillo era porque algún patito se me había escapado de la fila.
Imagínate si me viera ahora con la melenita.
Ojalá con todo el pelo que se fue se hubiesen ido un par de fantasmas.
Creo que todos sabíamos que era/es un cable a tierra poco ortodoxo (pero políticamente correcto). Él me hizo dar cuenta de muchas cosas sobre mí que ni yo sabía, y que no sé si tenía ganas de darme cuenta.
En días como hoy, que son siempre domingos, y siempre de mierda, lo amo y lo odio tanto que no sé cuál de las dos un poco más.
(Creo que el sentimiento no es odio pero literariamente queda muy bonito)

lunes, 16 de abril de 2018

Abrime los ojos

"Estoy complicada"
Dícese de la forma sutil de expresar que estoy hasta las bolas.

El peor final para Anto. 
Él me dijo que puede ser el peor principio.
¿Por qué nunca puede ser el MEJOR? Ah si, porque nunca voy a parar de cagarla. Y por que la palabra principio me da pánico, miedo, muerte y destrucción.
OTRA VEZ NO, ANTO. 

Nota mental: con el corazón roto y mal pegado, no tenés que volver a sentir cosas.

A dónde van los juguetes perdidos?

Sigo pensando que de alguna forma estamos conectados.
Mientras no nos olvidemos, mientras nos guardemos en la mente (pero más que nada en el corazón) vamos a estar siempre unidos.
Y pienso en que qué bajon es eso. Pero una vez más, me repito que ya voy a aprender a vivir con eso. O no. ¿Cuánto más voy a aguantar en esta posición?
Me llamaste. Y una vez más yo estaba búscandote. Y estaba buscandote muy fuerte se ve, porque te pensé con todas mis fuerzas a la mañana, y a la tarde ahí estabas vos.
O ahí no estabas. Porque nunca estuviste. Y porque no estás.
Pero ya no estabas en mis recuerdos, estabas en mis palabras. Estabas en mis mensajes. Porque me llamaste y no pude evitar pensar en hablarte. Porque no pensé que me necesitabas ni que me querías, porque entendí que me estabas stalkeando y se te fue la mano.
Y estamos tan lejos, que siete meses después, me pongo contenta porque a vos también se te da por stalkearme alguna vez. Porque capaz que no me bloqueaste de las redes porque ya no me querés más, porque capaz entendiste lo mal que me hacés y lo feliz que puedo ser sin vos.
Y en realidad creo que no es que soy feliz, sino que estoy bien. Estoy bien, estable, equilibrada, ¿encaminada?. Pero feliz de a ratos (¿qué no es eso la felicidad?). Feliz era la vida cuando me hacías serlo sin saber por qué, cuando todo lo demás me demostraba que no había motivos para serlo, pero yo podía serlo igual. Feliz era de a ratos, cuando me abrazabas y a pesar de saber que tenía que dejarte ir, que otra vez iba a volver a pasar lo mismo cuando me soltaras, me llenabas el corazón.

Qué feo y qué bueno que seas un recuerdo, nada más.

miércoles, 21 de febrero de 2018

efecto extrañitis

Creo que escribir sobre amor es más fácil. O mejor dicho, hacer magia con las palabras de amor. Porque son eso, palabras. Palabras que en realidad nunca van a reflejar lo que sentís, porque no se puede poner en palabras lo que se siente, se siente y ya.
O será que siento tanto que no existe una combinación posible de adjetivos que le dé la envergadura necesaria a mis sustantivos y a mis adverbios y a mis verbos. Y a mi todo.
O será que soy tan intensa que soy tan todo y soy tan nada. Que quiero ser todo y termino siendo nada. Pero siendo nada soy todo lo que no quiero.
Y vuelvo a pensar que es más fácil escribir de amor porque no lo siento, entonces soy libre de crear, ensayar, ponerme en la piel de otrx que seguro se siente identificado con lo que digo sentir.
Hoy repetía algo que dije hace algún tiempo. O lo confirmé. Creo que nunca te voy a dejar de amar, solo me voy a acostumbrar a vivir con eso. Es que en realidad no sé si te amo tanto que no te amo, que ya no es amor. ¿Quién puede definirlo?
Y si te amo tanto que no te amo, que te "no sé que verbo", te "no se inventó palabra con semejante intensidad". ¿Y si entonces todo eso, por qué desaparecés? ¿Por qué apareces desapareciendo?
Porque cuánto más desapareces más aparecés en mi vida. Porque cuánto más pasa menos me olvido o más te busco y menos te encuentro. Y cuánto menos te encuentro más ME aparecés. Y el problema es que vos podés desaparecer, pero yo no puedo hacerTE desaparecer.

Abrazame. Secame la lágrimas que tanto me sacaste vos. Abrazame fuerte y decime todas esas cosas que sé que eran mentira pero me encanta escuchar.
Pedime perdón por desaparecer y volvé a desaparecer(te).


Seis meses después y te lloro como si anoche te hubiese dicho que te vayas y no me la hagas más difícil.

La ¿suerte? de encontrarte alguna vez

Hoy te extraño después de mucho.
Hoy necesito tus mimos, tus abrazos, tus palabras lindas (aunque sé que son de mentira).
Hoy necesito dormirme llorando sobre tu pecho y entre tus brazos.

Solo por hoy, mañana (o pasado) te juro que vuelvo a dejar de extrañarte.

Enemiga de la realidad

Tengo un talento especial para percibir, que descubrí hace mucho pero que estoy reconociendo hace poco. O capaz es que de tanto determinarme escéptica el escepticismo se quiso burlar de mí volviéndome tan apreciativa que duele.
Es que hay muchas cosas de las que no me quisiera dar cuenta.
Cuando elegí el nombre de este blog y de muchas de mis redes, nunca pensé que podía definirme tanto. Soy tan enemiga de la realidad.
Y no es que viva en mi mundo de fantasía. Y no es que todavía ame a Chano (aunque un poco sí). Es que soy tan real que no puedo parar de odiarme.
No puedo parar de odiar todo lo que no me sale (y lo que me sale, porque me podría haber salido mejor). Y de tanto odio exploto de amor que no tengo a quien darle. Al final siempre es igual. Me empeño en ser una piedra sin sentimientos que desborda de sentimientos y cuando los expresa, aleja más que antes a quienes les rebotaba todo intento de amor.
Creo que por eso me pegó tanto el catolicismo.
Amo un montón sin tener que explicarlo y mucha gente quiere recibirlo. Y si no quieren no me importa porque tengo la convicción de que está bien (y es re lindo) que esté amando.

La nota mental que debería insertar aquí es que con parejas católicas no funciona de la misma manera.
NO APRENDO MÁS.
(cualquier similitud con mis pensamientos depresivos de los 17 es pura coincidencia).

martes, 20 de febrero de 2018

Confesiones de un Lunes de verano

Encontrarse con alguien más sinsentimientos que uno (una vez que ya los asumiste) es una experiencia nueva y un poco mal paquera.
Cuando pensas que cambiaste, te das cuenta que la intensidad y la inseguridad siguen intactas.

No puedo abrigarme en el frío de tu alma, Luis

lunes, 19 de febrero de 2018


CUANTO MÁS QUERÉS AL MUNDO,
MÁS TE QUIERO YO.

domingo, 18 de febrero de 2018

dETECTOR DE CACA

Si, te das cuenta que estas en la caca cuando esperás que te hable. Cuando estás tan acostumbrada a que te hable que después de haberlo visto, no te escribe y te das cuenta.
El problema no es que no escriba.
El problema es que te importa más de lo que pensabas.

EL PEOR FINAL PARA ANTO.

martes, 6 de febrero de 2018

La magia de las palabras

Hoy me puse a leer cosas viejas, académicas, y me dí cuenta de lo lindo que es hacer magia con las palabras. No sé si es que particularmente amo el lenguaje, la escritura y el arte de decir, o que realmente es posible hacer magia con las letras.
Yo creo que sí se puede hacer magia con las palabras. Si no todas las cosas hermosas que decimos y juramos podrían coincidir con los hechos. No se borrarían por que sí.
Si no fuera magia lo que hacemos con las palabras, si no fueran solo sueños y caricias al alma, las promesas de amor serían eternas. Todas se cumplirían, y no habría novelas, porque el amor romántico y de final feliz que nos quieren vender sería el de moneda corriente, y no tendríamos que mantenernos ilusionados con historias de cuento que sabemos que no son reales pero nos gusta comprar (por que soñar no cuesta nada, dicen).
En esa también disiento. Y no por el arte de disentir. Para mí soñar cuesta un montón. Y no porque no me acuerdo de lo que sueño la noche anterior. Hablo de soñar despiertx.
Y para mí cuesta una bocha, energía, fantasía, voluntad, creatividad, conocimiento propio, pasión. Porque si las cosas no tienen pasión no van ni pa tras ni pa delante.
Siempre hace falta una pasión, dicen también.

Y con esa concuerdo.

Si lo que hacés (o vas a hacer) no es con (y por) pasión, entonces no hagas nada, por que es al pedo.

lunes, 5 de febrero de 2018

Volver es crecer

Quiero escribir muchas pero creo que nada tiene sentido.
Nunca nada tiene sentido.
Pero ahora no puedo conectar todo lo que quisiera decir. Y no sé si es porque tengo mucho calor, me estoy por enfermar, quiero tener una pileta o simplemente no tengo ganas de hacerme cargo.

Creo que me gusta alguien.
(nunca superar, pero ver una historia y que no me parezcas tan lindo, es todo un logro).

martes, 9 de enero de 2018

Sé que no pudo darme, algo más que un par de promesas

también miré un millón de fotos juntos sin llorar.
creo que es la primera vez que no lloro desde que me dedico a mirar lo felices (y lindos) que éramos.

Si hay algo de lo que estoy segura hoy es de dos cosas. Que te amo todavía. Y que no sé por qué (ni hoy, ni antes).

Vos la flayas demás

Es la primera que escribo (o que pienso en hacerlo) sobre alguien que no sos vos (desde que no estoy con vos, claro está).
Y es todo tan raro.
Es lindo saber que alguien te mima un poco, te acompaña, te escucha (que es un montón).
Perturban los niveles de intensidad manejados. ME al menos.
Cuando decís "no, ya arreglé con Anto". ¿Está chequeado?
¿En que momento empecé a tener lugar en tu vida? Pero me pregunto más, ¿en que momento de verdad empezaste a tener lugar en la mía?

Odio ser tan chota. Cuando alguien es bueno y sabes que vale la pena, la discapacidad emocional se potencia. 
A veces creo que me merezco todas las forradas que me pasan, por chota.


Pero me preocupa no poder dejar de dar amor.