Noche(no tan)buena

"te abrazo fuerte desde acá y espero algún momento poder hacerlo personalmente"
Y no entiendo cómo todavía no sabe que puede venir cuando sea a buscarme y voy a estar ahí, llorando y saltando de la felicidad a la vez si me abraza.
Y no entiendo como no fui corriendo a buscarlo, a abrazarlo hasta que me saquen de al lado de el por loca de mierda.
Y capaz si lo entiendo.
Y me alegra y me desgarra a la vez.
Es que ya entendí que nunca me va a dejar de doler que no podamos estar juntos. Nunca. Pero también que no puedo atarme a algo que me rompe más de lo que me arma.

Hoy, tres-cuatro meses (y años) después, te amo más que cuando podía decírtelo mirándote a los ojos. Y te amo tanto que lejos se que estás mejor (y que yo estoy, que no es menor)

Erreway más que nunca

¿QUIÉN INVENTO EL ADIOS, EL OLVIDO Y LA DISTANCIA?

¿QUIEN INVENTÓ EL ADIÓS AMOR?

QUE NUNCA MERECÍ

Chat de facebook

Se me hace pedacitos el corazón cuando leo lo empalagoso que era todo.
Y hoy pienso que cualquiera me quiere más que vos

y no puedo dejar de leer que te volvía la alegría al cuerpo, que manijeabas todo el día para verme, que me extrañabas cuando me abrias la puerta, que cuando vivieramos juntos todo iba a ser re lindo.
Pero todo eso me lo acuerdo yo nomás
y creo que también lo sentí  yo nomás

Me duele extrañarte tanto cada vez que creo que ya no te extraño.

Chano lo dijo

dicen que para olvidarte
hay que tener en el bolsillo
un almanaque sin domingos

CON respuestas obvias

Anto, lo estuviste stalkeando otra vez?

MIL Y UNA MÁS

Me pega fuerte, como los días

Ayer pensaba que te había olvidado. Mí mamá me pregunto por vos y pude dar una respuesta sin llorar. Pase por tu casa, ahí estabas en la parada del colectivo con todo el sol y el viento haciéndote más lindo de lo que sos. Te volví a ver de lejos por segunda vez, y el tiempo no se ddtuvo como cuando me quise tirar del bondi para abrazarte.
Hoy se juntó toda la familia. Nunca se juntan, pero este año si.
Hoy estaban todos de a dos y vos no estabas al lado mío.
Hoy entendí que ya no estás al lado mío y que me muero por un abrazo tan fuerte que me deje sin aire.

Hoy te vi

Suena tan genial, tanta expectativa. Y es verdad, hoy te vi. Y esa es la descripción, te vi. Te vi pero vos no me viste, nunca te enteraste. Te vi y no me tiré del colectivo a buscarte, no me baje como una frenética (aunque pensé hacerlo unas paradas después y volver caminando para ese lado como si fuera a algún lado). No volvi a buscarte.
Te vi y me pasó de todo. Y solo te vi.
Y ahora se que estas bien (con algún que otro problema en la moto, pero bien) y eso me deja en paz.
Y yo sabía que te iba a ver, me estaba preparando:
Yo venía escuchando los redondos
Yo venía mirando para la ventana
Yo venía del lado de la puerta
Yo venía amándote
Yo venía llorandote

(Y vos no me viste)

Entonces es como un mes

Hace algunos días que me ato las manos para no escribirte. No sé si me duele más no saber de vos o que vos ya no quieras siquiera saber de mí.
Hace un mes (o algo así porque nunca tuvimos fechas, está no iba a ser la excepción) y para mi son años.

Hace un mes y te sigo llorando.

Jugando al olvido

Hoy te extrañe tanto que necesito escribirlo en algún lado para no decírtelo.
Ya se todo eso de que lejos estamos mejor, pero pedirle a mi corazón que deje de amarte es un montón.

Y simplemente pienso que nunca voy a dejar de hacerlo, solo me voy a acostumbrar a vivir sin vos.

Extraño tu corazón

En la vida debe haber un tiempo para todo. No somos eternos y no tendría sentido que algo hecho por nosotros lo fuera. Capaz yo llego tarde a todo. 
Esta vez llegué tarde a medias.
Cuando me cansé de preguntarme que había hecho para que me dejes de querer, entendí que nada. No había nada distinto en mi. Al contrario, cada vez hacía más cosas para que me quieras más. Me empeñaba en ponerme linda cuando nos veíamos, siempre usar ropa distinta, la que me quedara bien. Volví a obsesionarme con la comida, para que no salgas con una gorda. No me corté el pelo para que no te carguen con que tu novia tenía cara de alfajor, y tampoco me teñí de rojo, para que no te acusen de salir con una villana. 
Tampoco con mis acciones. Dejé hasta de contarte mis problemas para no agobiarte, por más de estar re triste, por más de necesitar tu contención. Dejé de escribirte todo el tiempo, para no molestarte. Esperé siempre a que me llames y nunca fui de esas personas obsesivas que te llenaban la casilla con llamadas perdidas. Nunca te pedí explicaciones de a dónde ibas, con quien o por qué. Nunca desconfie. Siempre que pude te llene de regalos aunque claramente no materiales como hubieses querido, pero a mí manera no me compraba algún que otro gusto yo para poder llevarte alguna de las golosinas que tanto te gustan cuando nos veíamos. Quise hacerte formar parte de mi mundo más de un millón de veces, contándote que hacía, prestándote mis libros, invitandote a planes con mi gente. 
Tampoco te obligué a planes que no querias, siempre respeté tus "no" y nunca me enojé.

Entendí entonces que yo no habia cambiado, que yo no me había cansado.  Entendí que vos eras el que me mirabas distinto.
Y entendí también que yo no puedo hacer nada.
(No sé lo que daría por que me volvieras a amar como me amabas cuando yo no entendía que lo hacías)
Me duele reconocerme inmóvil. No puedo resistir el solo hecho de pensar que hay algo que no depende de mí. Que no todo pasa por mí culpa.
Siempre pensé que el día que no sintiera culpa iba a ser una mujer libre (y feliz). Pero nunca me imaginé que no sentirla me iba a desmoronar de esta manera, me iba a hacer tan INfeliz (de la libertad ni hablemos, porque esa hoy me sobra).
Agradezco a todos los que me respetaron, aconsejaron y acompañaron. Pido perdón a todos los que defraudé, pero siempre les dije que era yo sola quien tenía que darse la cabeza contra la pared para aprender.

Y me la di. 

Sé que se trata de tomar lo malo para convertirlo en bueno. Y eso no me preocupa. No me estigmatiza equivocarme. Estoy convencida que de los errores se aprende, pero...  ¿Cuándo amar es un error? Tengo que aprender de un no-error. Tengo que aceptar que no puedo cambiar más nada de mí para alcanzar lo que quiero. 
De a dos no es uno más uno. No todo lo bueno es siempre bueno. Mi perseverancia hoy, es mí peor enemiga. 

Cuando ya no esté y seas feliz, ojalá puedas explicarme por qué.

Te obedecí hasta donde pude, mi genio amor. 

Este vacío soy yo

Esperas un domingo de lluvia para que te abrace fuerte, para mirar todos los capítulos de la serie y que alguno de los dos se quede dormido antes de que terminen.
Pero no pasa.
Y después te das cuenta que no querés que te quiera solo un domingo de lluvia, o una siesta. 
Querés que te quiera los lunes de frío, los miércoles de calor  y los viernes de sol. Querés que te quiera a la mañana, sin el desayuno, llegando tarde, antes de dormir, en los mates de la tarde, o incluso, durmiendo.
Pero sos vos nomás la que querés.
La que querés (y querés que te quieran)

debería dejar de llenarme de por qués

¿Qué nos pasó?
¿Dónde está todo el amor que me regalabas? ¿Ya se te gastó?
¿Me lo quedé todo? ¿Me lo acabe muy rápido?
¿Por qué no podemos amar todos de la misma manera? 
¿Por qué no todos podemos ver lo bueno antes que lo malo en el otro? 
¿Por qué nos cuesta tanto poner las cosas en palabras? 
¿Por qué nos cagamos siempre en esas personas que nos son incondicionales? 
¿Por qué esquivamos a quienes nos abren los ojos? 

¿Por qué el amor es tan puto?

norte y sur

Nunca quisiste tener novio porque eras una mujer independiente. No necesitabas (ni querías) nada de nadie. Podías defenderte vos misma, volver sola a tu casa de noche, pagarte tus birras, organizarte tus viajes y tomarte el palo sin necesidad siquiera de contarlo. Podías hacer lo que querías, porque la convicción de que eras LA mujer independiente, era tuya y nada más que tuya.
Pasó el tiempo y empezaste a pensar que capaz no eras independiente, que en realidad estabas sola. Que estabas más que muy sola. (Ahí deberías haber entendido que tenías el arte de transformar lo negativo en positivo, pero elegiste ver la parte de atrás de la hoja).
Cuando ya empezaba a asfixiarte la soledad, cuando era insoportable convivir con tu silencio, te diste cuenta que tampoco estabas tan tan sola. Y entonces el mínimo interés por vos lo fue todo. Te encontraste yendo a cargar crédito para avisar que habías llegado bien, inventando mil excusas para tener más ratos para verlo. Te sentiste querida y cuidada aunque no querías (o si) y todavia te hacías la dura. De repente te enamoraste, y casi sin darte cuenta amaste por primera vez, cómo nunca pensaste que vos podías (capaz sí sabías que podías, pero nunca pensaste que ibas a querer hacerlo).
Y después ya no entendiste más nada. Te esforzaste en poner a los ojos de todos lo que tus ojos veían: el bombón de la novela que venía a salvarte y dejar la vida por vos. Sin saber cómo ni por qué te enamoraste de esa persona que nadie entendía (y que ni vos tampoco). Te encontraste queriendo transformar a tu opuesto en un complementario. O te convenciste de que podías. Y lo podías todo, porque tu amor era tan grande que nada lo iba a hacer cambiar. Te convenciste, una vez más, de que eso querías para tu vida.
Pasó el tiempo y la vida te gritó, te dejó mil llamadas perdidas, te llenó la casilla de mensajes, pero vos nunca escuchaste, nunca quisiste atender. Nunca quisiste ver que tu exceso de amor te estaba llevando por un camino que no era el que vos querías para tu vida.
Y fue tan grande tu negación, tu amor, tu servicio (o tu estupidez), que sabiendo que no era lo mejor para vos, volviste cuando podrías haber huído para siempre.
Después de cuatro años estás otra vez acá. Sin entender mucho nada, siendo una mujer independiente, y amando un montón.
Amando tanto que no te importa tener el corazón roto y mal pegado, porque una vez más, vos sos independiente y no necesitás que nadie te ayude a pegarlo.

Antonella

cualquier parecido con mi realidad, es pura coincidencia.

Algo de vos

Podríamos haber sido futuro. Y sigo en este círculo sin salida. Porque cuando la tengo, no la quiero. ¿Como se hace para salir? ¿Que más necesito para alejarme? ¿Que espero para reaccionar?
A veces siento que es horrible que no te quieran. Pero es tan feo cuando te quieren de más.
El problema siempre lo corro de eje si se trata de el. ¿No seré yo la que quiere de más y no el que no quiere lo suficiente?

No quiero más estar lejos tuyo, nunca. Pero nunca tendrías que haber vuelto.

Sos la genia de las decisiones, Anto. Felicidades por hacer todo tan bien en la vida y por tener un corazón tan grande y que no le gusta ver a nadie sufrir!!!!
Casi 22, casi 4 (con vos) y no aprendo más.

No sé

A cada instante quiero frenar todo. Y a cada medio instante más me arrepiento. Porque lo más chiquitito me sirve para detenerme, para contestarme. Porque en el fondo quiero tomar una decisión que creo que tengo que querer.
Y en este intento de convencerme de lo único que me convenzo es de que te sigo amando como el día que me di cuenta que lo hacía, y que te sigo eligiendo a pesar de querer hacerte de nuevo cada dos días y volver a buscarte en el diseño original cada tres.
Y tal vez con el amor no baste.
Y hoy eso me duele y me reconforta.
Y aunque quiera creer que me La paso tomando decisiones, sé que la más importante está por llegar, y ya entendí que no puedo forzar nada (porque de tanto forzar ya me cansé de romper cosas)

Justo entendieron todo cuando no había más nada que entender

Entender o no es difícil. Más difícil es darte cuenta que ya no hay nada que entender.
Una vez te dije que con el amor solo no alcanza. Ahora se como es la vida desde el desenamoramiento pero sostengo eso desde el amor. Si hay algo que estoy segura es que no hay acá des-amor.
Error de compatibilidades. Estoy o quiero estar en otra. Quiero todo y nada a la vez. Creo que me quiero un poco a mí (que antes no lo hacía ni un poquito) y por eso empiezo a pensarme.
En vez de cabeza tengo una tómbola, una ruleta que gira y gira. Y el corazón lo escondí por ahí y lo deje jugando solo... Me olvidé de ir a buscarlo.
Empiezo a entender que quiero y espero idealizaciones que son eso, hermosas construcciones de mí mente. Que no puedo soltar. No puedo soltar un texto del que me enamoro, no puedo borrar un ensayo que me llevo días de escritura. No puedo pensar(me) sin la paz que me regalas aunque puedo reemplazarla, pero no puedo hacerlo porque se que vos estás ahí ofreciendomela.
Y aunque ya me convencí de que está mal, no puedo hacer desaparecer mí amor. Lo intento. Pero yo sé que está. Y también se que no tiene que estar. Pero no sé si no tiene que estar por mí o porque ya me convencieron de que es así. Y me duele seguir con la venda en los ojos porque por mucho que miro no puedo ver.
¿Puedo estar tanto tiempo ignorando?
Se supone que sólo uno mismo sabe que es lo mejor para uno, pero asumo en carne propia lo que todos creen que es lo mejor para mí. (son muchos y me conocen, deben tener razón)
¿me cuesta enfrentarme o hay algo más que en algún punto me hace darles la razón?

Todos tenemos
esos
días en que
NOS ESTALLA EL CALEFÓN

No sé porque hace tantos días que venís invadiendo mi cabeza. Y digo invadiendo porque ya no es acompañando. Y no sé por qué te pienso tanto.
O capaz que sí. Capaz que porque me acuerdo de todas las cosas lindas.
Y no sé por qué.
O capaz que sí. Y me da miedo asumirlo.



no le pongo título porque sino sería "te extraño". Mucho. 
Vení a abrazarme. 
(No, mejor no vengas porque después te vas ir.)

Wow

No puedo creer que haya pasado tanto tiempo y me encuentre acá.
Y a veces pienso que son esas pequeñas cosas que estan en la esencia, las que no cambian.
O tal vez reaparecen personas, gestos, recuerdos de cuando era lo más mi blog (y yo también).
Sospecho que leer entradas viejas no fue una buena idea para un día de lluvia. Pero también creo que no se trata de tapar las cosas, sino de sanarlas, acomodarlas, darles su lugar. Y es dificil cuando no sabés en que lugar ponerlas. Por que hay personas que no entran en un solo lugar. Y hay recuerdos que no entran abajo de la alfombra, pero que ya no está bueno que estén sobre la mesita de luz.

Sé que nunca vas a leerme acá, por eso te digo que más allá de todo, aunque no sepa bien hoy como pensar sobre el amor, sé que me diste lo más parecido.