Ser instinto y libertad

miércoles, 31 de mayo de 2017

Justo entendieron todo cuando no había más nada que entender

Entender o no es difícil. Más difícil es darte cuenta que ya no hay nada que entender.
Una vez te dije que con el amor solo no alcanza. Ahora se como es la vida desde el desenamoramiento pero sostengo eso desde el amor. Si hay algo que estoy segura es que no hay acá des-amor.
Error de compatibilidades. Estoy o quiero estar en otra. Quiero todo y nada a la vez. Creo que me quiero un poco a mí (que antes no lo hacía ni un poquito) y por eso empiezo a pensarme.
En vez de cabeza tengo una tómbola, una ruleta que gira y gira. Y el corazón lo escondí por ahí y lo deje jugando solo... Me olvidé de ir a buscarlo.
Empiezo a entender que quiero y espero idealizaciones que son eso, hermosas construcciones de mí mente. Que no puedo soltar. No puedo soltar un texto del que me enamoro, no puedo borrar un ensayo que me llevo días de escritura. No puedo pensar(me) sin la paz que me regalas aunque puedo reemplazarla, pero no puedo hacerlo porque se que vos estás ahí ofreciendomela.
Y aunque ya me convencí de que está mal, no puedo hacer desaparecer mí amor. Lo intento. Pero yo sé que está. Y también se que no tiene que estar. Pero no sé si no tiene que estar por mí o porque ya me convencieron de que es así. Y me duele seguir con la venda en los ojos porque por mucho que miro no puedo ver.
¿Puedo estar tanto tiempo ignorando?
Se supone que sólo uno mismo sabe que es lo mejor para uno, pero asumo en carne propia lo que todos creen que es lo mejor para mí. (son muchos y me conocen, deben tener razón)
¿me cuesta enfrentarme o hay algo más que en algún punto me hace darles la razón?

Todos tenemos
esos
días en que
NOS ESTALLA EL CALEFÓN