Saben, creo que desde siempre quise ser TS.
No tengo ese recuerdo consciente, y siempre asocio esa decisión a los 17/18 años.
Pero como cinco años antes, el nombre de este blog ya era: REVOLUTION.

Mis revoluciones son chiquitas, pero aunque este hundida en la depresión y la falsa soledad, amo y celebro todas aquellas que puedo reconocer como conquistas mías (y con mucha ayudita, clara está)

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Hace una semana estoy recibiendo mucho mucho amor. Más del que merezco, incluso. Amor en forma de mensajitos, de abrazos, de fotos, de regalos, de risas, de todo. Estoy realmente sorprendida de la cantidad de gente que me demostró su alegría y está compartiendo este logro conmigo. No tengo dudas que no todo está tan mal conmigo, se ve que algo bien hice porque estoy rodeada de personas recontra muy hermosas.
Pero cuando todo va tan bien tengo que cagarla. ¿Por qué soy así?
A veces buscamos grandes cosas y yo creo que solo quiero una chiquitita. Hoy pienso (y siento) que puedo ser hasta intendente como sueño desde los 10 años si me lo propongo, pero sé que nunca voy a tener el amor de los que yo amo. No importa cuando, como, donde, quien, nunca va a pasar.
El otro día mi mamá me dijo que pensaba que "ya estaba, que había encontrado al hombre de mi vida" porque "éramos iguales". Siempre tan oportuna mi vieja, que no se da cuenta que tengo el corazón recontra roto y que me duele asumir que ya fuimos.
Y no pensé que me iba a doler tanto.
Más allá de todo lo que nos faltaba, estoy segura que lo intentaría mil veces más.
Días como hoy no quiero hacer la revolución, sólo quiero que me quieras un poquito.

Licenciada en Fracasos

No entiendo nada. Hace 24hs era la mejor noche de mi vida. Llego el llamado. Me recibi. Todo era gritos y eufória. Desconcides felicitándome y dándome birra. Mucha birra. Cuánto hace que no escabiaba así.
Mis amigas se vinieron desde la concha de la lora a las 2am sólo para festejar conmigo.
Después llegaron los los mensajes emotivos. Me llene de amor. No podía creer que tanta gente me deseara cosas tan buenas y lindas.
Me sentí acompañada Posta.
Mis amigas son lo más. Si hay algo que hice bien en esta vida fue eso.
Y todo era feliz hasta que me escribió el. Y me agarró un dolor de panza que inmediatamente corrí al baño. El cuerpo me sigue pasando factura de lo que tapo.
Le respondí. Le dije un millón de cosas que no tenía que decir. Quiero que vea mi peor versión, que me diga cosas duras por sentimental y dramática así entiendo que no me quiere.
Necesito su dureza. Necesito que me diga todo lo que se y no quiero aceptar, todo lo que asumo pero no entiendo.
Necesito que me duela para destruir esperanzas.
Por ejemplo la de que el jueves me de un abrazo y me diga que es un pelotudo por haberme dejado ir. Al menos la de salir y verlo.
Y adivinen de que se acaba de dar cuenta la pelotuda?
Que quiero compartir algo con alguien que no quiere.

la historia siempre tiene el mismo remate.
y yo no aprendo más.
Y tampoco dejo de sentir.

Que Dios me lleve ya.

La agonía de la espera

En una semana puede cambiar mi vida, o no.

Sin certezas, con el corazón en la boca y el eterno ataque al higado sigo. Empecé a organizar mi recibida. Todavía no sé si me recibo, pero no importa, empecé a organizarla igual, porque después de tanta malaria es necesario el festejo.

Y entre tanta fiesta y tanta emoción y tanto todo, solo pienso que me va a faltar alguien.

Y pienso qué es algo que quiero yo y que busqué como a nada (recibirme, claro está) pero ¿quien puede disfrutar de la felicidad solx?

Es metafórico. No salgan a golpearme. Entiendo que no estoy sola. Pero me muero de ganas de compartir este logro con vos. 

Sueño que te aparecés de sorpresa con todas las cosas que me dijiste que ibas a dejar vencer y me abrazás con orgullo.

Entonces me rescato que eso fue un montón. Y solo sueño que aparecés, tímido, en un costado, pero llegas justo para ver la secuencia de lejos.

Después bajo a la tierra y deseo que al menos me mandes un mensaje en el momento crucial, cuando este esperando la nota.

Pero rápido caigo a la realidad y me acuerdo que ya no te importo, y que si me mandas un mensaje va a ser después de que veas alguna foto, y por lástima o compromiso.

Hace siete años citaba a Ale, y hoy comparto ese recuerdo:

YO SÉ QUE NO EXISTE UNA CURA

SOY SOLO YO LA ENFERMEDAD

El festival del "estoy bien"

Ya se está pasando esta malaria y me siento bien para escribir. Después de casi tres semanas de muerte, hace dos días consecutivos que me siento bien. Me había olvidado como se sentía eso, como me pasó hoy con el chocolate después de una semana sin comer.
Con una amiga llegamos a la conclusión de lo que me pasó fue un festival. El festival del "estoy bien". Me empeñe tanto en mostrarme y creerme que estaba bien, que me olvidé de escucharme. Y no estaba bien un culo.
Necesite ayuda. Necesite mimos. Necesite todo. Y no lo supe. No lo pedí, porque creía que tenía que venir naturalmente. Y nada vino. O si vino no lo supe recibir.
Y necesite tanto todo que hoy que empecé a hablarlo entiendo todo lo que me afecta. Todo lo que me duele. Todo lo que me pesa. Soy de carne y hueso. Me duele la vida. Me duele no poder resolverle los problemas a mis seres queridos. Me duele ver mal a los que quiero. Me duelen las injusticias. Me duelen las cosas mundanas que me enojan y quiero tener/ser. Me duele tu ausencia. Me duele no saber de vos hace tres semanas. Me duele que no me hayas escrito. Me duele que no me estés extrañando, que no pienses en mí de a ratos como yo, y quieras volver a intentarlo.
Me duele que no me quieras.
Ayer otra amiga le dijo a la ex "me merezco estar con alguien que quiera estar conmigo". Yo no estoy tan segura que yo me lo merezca, pero lo quiero.
Mi amiga me decía que yo fui super genia y clara con mi cabeza y con como maneje todo. Y no tengo dudas que mi cabeza se puso la 11 toda la relación. Mi cabeza entendió todo. El problemita es otro que funciona como el ogt. Entiendo todo, les juro que lo entiendo. Pero no me pidan que lo sienta, mejor dicho QUE NO LO SIENTA, porque no puedo.

Te quiero, te quiero tanto que no entiendo cómo vos no me querés a mí.