Que pajera que estuve estos días, por diossssssss. A veces pienso que si tuviera el mismo chamuyo que tengo en las instancias evaluativas con los hombres, sería una megan fox cualquiera. DIOS. Me sirvieron mucho éstos días igual, y me encontré nuevamente conmigo misma. Es verdad, perdí dos días de mi adolescencia mal por un pelotudo... no me molesta estar mal una semana porque no tolero la situación de mi casa, pero si me jode haber perdido dos días por un cornudo de mierda. Pero lo entendí, mi adolescencia es genial y no voy a perder mi tiempo en desperdiciarla, hoy fue un lindo día aunque no pasó nada en especial, pero es importante sacarle lo mejor a esas pequeñas cosas, que siempre te pueden dar felicidad.
Entendí que tengo diez y seis años, no tengo cinco para huir como una pendeja ni tengo treinta para independizarme y manejarme con madurez. Acepté que estas transiciones son normales. Es mucho el camino que falta, y estoy contenta hoy con el haber llegado hasta acá de esta manera.
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